Cooperativas de Caficultores requieren prontas soluciones
En el municipio de Palestina, Caldas, el 19 de diciembre de 2024, el presidente Petro hizo varias afirmaciones relacionadas con las cooperativas de cafeteros, la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), los contratos de café a futuro y otras sobre asuntos del sector caficultor. Sobre parte de esas afirmaciones, y como respuesta, se refirió -en la red social X- el gerente general de la FNC, Germán Bahamón.
Posterior a dichos acontecimientos, dirigentes de Dignidad Agropecuaria Colombiana y Dignidad Cafetera Nacional se reunieron para adelantar el respectivo análisis discernir la posición oficial de dichas organizaciones y dar una respuesta a los planteamientos de Petro y Bahamón.
La esencia de lo planteado por el presidente de la República sobre el problema de la venta de café a futuro se resume en la siguiente afirmación de su discurso: “las cooperativas, o más bien, el Fondo Nacional del Café tiene que pagar el excedente entre el precio bajo firmado por las cooperativas y el precio alto”.
Para luego agregar: “déficit que tiene que pagar el Fondo Nacional del Café que propiedad pública, es decir, es del gobierno nacional, pero contratado con una entidad privada, que es la Federación Nacional de Cafeteros, se ha desfinanciado en un solo año en 180 millones de dólares, una nueva deuda que alguien tiene que asumir”. Y remata: “Podría ser el gobierno, claro. En un nuevo pacto cafetero, claro, pero ese nuevo pacto cafetero podría traer nuevas condiciones, entre ellas, los procesos de industrialización y de regionalización del café, pero nos han desfinanciado”.
Miremos ahora la respuesta del gerente general de la FNC, en la red social X.
El Fondo Nacional del Café, NO ESTA EN RIESGO. Tanto el Fondo Nacional del Café, como la Federación Nacional de Cafeteros, muestran solidez patrimonial […] El FoNC en un acto responsable ha soportado estas coberturas para mantener el sistema cooperativo vivo. La Federación Nacional de Cafeteros nunca ha especulado”. Después afirmó que: “Las cooperativas de caficultores son entidades autónomas e independientes…… es a ellas a quienes el Gobierno Nacional podría entrar a apoyar, para fortalecer su función social”. Y concluyó: “El Congreso Cafetero recomendó gestionar ante el Gobierno Nacional un crédito público con condiciones especiales a las cooperativas de caficultores, para darle oxígeno al sistema. Ese apoyo sería recibido con beneplácito por el país cafetero”.
Bien, el análisis de los asistentes a la reunión de balance señaló lo siguiente:
1. El Fondo Nacional del Café (FoNC), es un fondo administrado por la FNC. Sus recursos son de los cafeteros, no del gobierno nacional. En eso el presidente insiste en el error. Recordemos que ya había afirmado lo mismo en Pitalito, Huila.
2. La deuda es una deuda de varios miles de productores de café -que también requieren de apoyo a largo plazo para pagar- y de 18 cooperativas de caficultores que, instigados por la FNC, suscribieron o aceptaron, entregar café a futuro. Por varias razones no cumplieron cafeteros y cooperativas. Pero esos incumplimientos trasladaron el problema al garante de dichas operaciones en la bolsa de Nueva York que es el FoNC. Es claro que la FNC tiene responsabilidades, también, en estos negocios que propuso Roberto Vélez, y respaldó el Gobierno de Duque, en el Comité Nacional de Cafeteros. La deuda del FoNC, o las operaciones de cobertura “para mantener el sistema cooperativo vivo” tiene elevados costos económicos para el FoNC y, en esos costos la Federación, como administradora del FoNC, ha debido aprovechar las bajas de precio en el mercado internacional del grano, para terminar dichos contratos. Suprimir la especulación. Sin embargo, no lo hizo. Debe señalarse, que el gobierno nacional, es parte del Comité Nacional de Cafeteros y nada dijo y nada ha dicho, pero, sobre todo, nada ha hecho, para ponerle orden al manejo financiero del FoNC.
3. A más del riesgo que viven las 18 cooperativas debe señalarse el que atraviesa el FoNC que, aunque tenga liquidez, como afirma el gerente Bahamón, no puede seguir perdiendo indefinidamente patrimonio. Debe, entonces, el gobierno nacional aceptar la propuesta hecha en el 93º Congreso Nacional de la FNC y extender créditos a las cooperativas, con plazos de pago amplios, bajas tasas de interés y cuotas de amortización que les permita cumplir y pagar lo adeudado. Pero, debería también el Gobierno Nacional, por su omisión permanente para atender el problema de la venta a futuro, aportar a la solución. Las cooperativas son, en su esencia, economía popular.
También debe asumir responsabilidades frente al asunto, la FNC, que embaucó a las cooperativas en los contratos para la venta de café a futuro. Y más, si como afirma el gerente Bahamón, “Tanto el Fondo Nacional del Café, como la Federación Nacional de Cafeteros, muestran solidez patrimonial”.
4. Solo tendría que resolverse lo que el presidente Petro llama “un nuevo pacto cafetero, claro, pero ese nuevo pacto cafetero podría traer nuevas condiciones, entre ellas, los procesos de industrialización y de regionalización del café, pero nos han desfinanciado”
Si se trata de condicionar una situación de emergencia, de coyuntura, a la solución de un problema estructural en el manejo del FoNC y en el contrato de administración del mismo, la solución para las cooperativas y para los caficultores -que no cumplieron con los contratos- no llegará y el pantano financiero en el que están se mantendrá y el del FoNC, continuará. Y si, además, se va a someter la solución -que es un préstamo del Estado a las cooperativas- a los problemas de des financiación aludidos y a la industrialización y regionalización del café, menos solución habrá. Y todo se irá en ilusionar a las gentes del café y, finalmente, nada resolver y para lo cual, se anticipa que, “nos han desfinanciado”.
Como organizaciones de productores de café, creemos que se debe crear una mesa para definir políticas públicas para la solución del problema planteado. Hemos escrito a la Ministra de Agricultura, doctora Martha Carvajalino, para avanzar en este camino. Esperamos reunirnos con ella y con otros funcionarios de Gobierno Nacional en los próximos días a ver si podemos, por fin, encontrar eco a las peticiones de las cooperativas de caficultores. También trataremos de conseguir un debate de control político. Al menos, ya logramos que se hablara de esto en el 93º Congreso de la FNC.